ESTRENO 2 DE MARZO - 21 HS. - TEATRO VICTORIA

Urfaust por sus protagonistas: A dos semanas del estreno, Isabelita y El Estudiante

La obra es una historia de amor, entre un hombre y una  joven adolescente, la cual surge y se desarrolla en un universo de ambición, pecado y perversión, dejando a la vista características extremas de los personajes.

Ahonda en temas propios del ser humano en un vínculo muy estrecho con la religión y el mundo espiritual que ésta propone. 

Isabelita es una joven de 15 o 16 años, amiga de Margarita, que desarrolla en sí misma la inocencia característica de una adolescente y la perversión de sus propias ambiciones, quedando expuesta en su propio desdoblamiento, con ella misma y con el otro personaje.

Me interesa hacer la obra porque es un nuevo desafío actoral, porque confío en la propuesta, en el elenco, en el director y en el equipo técnico. Y es un placer pensar en el producto “acabado” de un proceso de trabajo que ha sido muy productivo y disfrutable en general.

Desde lo grupal, tengo la expectativa de que el público se sienta atraído por la propuesta, que den ganas de ir a ver la obra y que nosotros como grupo podamos transmitir y reflejar un proceso de trabajo intenso y dedicado, que deje en el espectador algo diferente. Y en lo personal, espero poder jugar lo suficientemente libre como para responder a las necesidades que surgen con el personaje y que como actriz me sienta conforme, tanto en lo interno como en la convención con el público.

(Matilde Nogueira)

Bueno, la obra tiene de todo, tiene obsesión, crueldad, amor, arrepentimiento, denuncia, locura, inocencia y muerte. Fausto un hombre de ciencia que al parecer ha alcanzado todos los logros habidos y por haber en su vida, no se siente completo y quiere ¡más!, tanto que llega ha hacer un pacto con el Diablo. Luego Fausto se enamora de una muchacha llamada Margarita y le pide también ayuda a su ahora "compañero de viaje". Lo que pasa es que no hay que olvidar que está tratando con el Diablo y como en el casino "la casa siempre gana".

El personaje del "estudiante" el cual yo interpreto vendría a ser un instrumento de denuncia social de Goethe. A mi sentir el estudiante desde su ingenuidad demuestra como el poder del que sabe influye directamente sobre el que no. Como esté enviste de poder a la otra persona, es esa investidura la que hace que hagamos cosas, creamos cosas y accionemos en pos de estas, sin siquiera planteárnoslas. Al mismo tiempo plantea la cuestión de la responsabilidad del que sabe.

El interés que siento sobre esta obra me remite directamente a la oportunidad de trabajar y aportar desde lo que sé y de lo que no sé a una obra con características geniales. Además de tener la oportunidad de compartir este viaje con un grupo de seres humanos maravillosos, con el cual no se dio la oportunidad en otro proyecto.
Y las expectativas... por sobre todo crecer. Sentir, hacer sentir y enamorarme como siempre una y otra vez de está hermosa profesión.

(Mauricio González)

Urfaust por sus protagonistas: Fausto y Margarita

Urfaust, obra de Goethe escrita en 1773, es nuestro próximo estreno este 2 de Marzo de 2013 en el Teatro Victoria.
Digo que voy a hacer “Urfaust” cuando me preguntan ¿qué vas a hacer este año? Y hay dos posibilidades:
- Cara de no tengo ni puta idea de lo que me estás hablando o
- Cara de qué embole, me suena a bodrio.

Inevitable no quedarme pensando qué es lo que no anda bien.
A todos ustedes que por no saber de qué va sienten rechazo, les cuento que esta obra difunde el mito popular de Fausto, el que le vende su alma al Diablo.
Urfaust vendría a ser el proto Fausto, o sea el "primitivo" Fausto (sí, escribió varias versiones de este historia, y la última la termina poco antes de morir).
Tranquilos, lo entreverado ya terminó.
 

Fausto es un intelectual muy reconocido que ha estudiado todas las ciencias, sin embargo siente que nunca va a llegar al Saber. Se siente frustrado, y miserable por constatar que cuanto más sabe más preguntas encuentra sin resolver. Y tras constatar continuamente que lo que enseña no lo puede justificar desde la raíz, comete lo que para la época era herejía; dedicarse a la magia con el objetivo de convocar a los espíritus. Tras varios intentos fallidos logra convocar al diablo, con el cual realiza un pacto: le vende su alma a cambio de tener poder.
Al realizar el pacto Mefistófeles le muestra lo que es tener poder, mediante una vida de excesos, vida  intensa y desconocida para un intelectual recluido. En medio de la vida descontrolada Fausto conoce a una chica muy joven y la quiere poseer. A partir de acá la trama de la tragedia está armada, ¿cómo? Vengan a ver la obra.

La obra es un texto con una contemporaneidad apabullante donde la hipocresía, la doble moral y los intereses desatan consecuencias terribles. Es una tragedia interesante, con momentos de humor y mucha actualidad, críticas al sistema educativo, a la iglesia y porqué no al amor.
Mi rol en la obra es interpretar a Fausto. Inteligente, cínico, arrogante, pero a la vez es inmensamente ingenuo. Sabe lo que quiere pero cuando se acerca a su objetivo duda. Se siente vacío internamente pero es un volcán. Está solo.

Esta obra como todas es un desafío, en este caso el desafío implica interpretar un personaje muy complejo, cargado de dilemas existenciales y filosóficos que permiten incontables lecturas debido a la contemporaneidad del texto. 

Mis expectativas van muy encaminadas; aprender de las dificultades que propone el texto pero sobre todo, de la acción. Estar vivo.
¿Porqué hacer Urfaust? Actoralmente por el desafío que implica y por su necesario aprendizaje. Además me permite dejar mi opinión como artista sobre ciertos conceptos, situaciones. Y sobre todo porque plantea preguntas, que es para mí el objetivo fundamental del teatro.

(Germán Weinberg) 

 

Margarita según escritura automática:

Margarita inocente tan como niño que mira por ventana quiere ser parte afuera pero es adentro con las cosas para hacer y decir no desobedece nada madre padre hermana hermano tutor todos nadie esta en ella piensa canta bajito cose sabe mira gusta ve beso de gusto de vos hadas de cuento de amor realidad negra mujer terrible sangre hijo manos pajarito muerto

Como se lo contaría a mi abuela (quien no tiene idea de la historia y no le gusta ni un poquito el Diablo). Nuestro diálogo sería más o menos así: P - La obra en la que estoy es una tragedia.

A - Me encanta que estés en un drama. ¿Te morís nena?

P – No abuela…

A – Menos mal

P – En realidad, no sé si no es peor.

A – ¿Otra vez te besas con una mujer?

P – No abuela, esperá que te cuento.

A – Despacito que me entrevero.

P - Fausto es un hombre que estudió muchas cosas y cree saber mucho. Es muy ambicioso, quiere abarcar y controlarlo todo. Lo enceguece el poder y el saber. Se encuentra con el Diablo y le vende su alma, o sea que va a poder cumplir sus deseos pero va a sufrir consecuencias por andar haciendo negocios con el Diablo.

A – Y sí…

P – Conoce a Margarita y se obsesiona con ella. Yo hago de Margarita, abuela. Ella vive con la madre.

A – Y sí…

P – La cosa es que se terminan conociendo y ella se enamora. Él creo que en realidad no, pero dice que sí. Para poder pasar la noche juntos.

A – Y?

P – El resto lo ves en el teatro…

¿Por qué quiero hacer esta obra?

Porque me interesa la oportunidad de crear dando mi opinión como actriz y como ciudadana que vive en el 2013 y en Montevideo, sobre una historia que alguien contó y que situó en otro país y en otro tiempo, con sus circunstancias. 

(Paola Larrama)

A partir del ensayo de hoy

 
Lo que se ve,
lo que no se ve,
el cansancio de la recta final,
la necesidad de tomar aire y aún, sí, aún
dar un salto aún mayor.
¿Será posible?
Sí,
será.

Pienso en la puesta, en los actores, el diseño, el espacio, el sonido...
Me vuelvo a preguntar por qué quiero hacer esta obra,
sólo desde ese lugar creo posible aparezcan propuestas verdaderas.

Pienso en lo que los otros ven y esperan, también...
tomo distancia,
dirigir tal vez sea un ejercicio de tomar distancia,
de mirarlos a todos, de escucharlos a todos,
de mirarme y escucharme a mi mismo,
y tomar distancia de todo,
todos,
de mí mismo,
para que aparezca la obra,
habiendo incluso tomado distancia de ella. 


JSPR.

Urfaust: hablan sus protagonistas

Sobre la obra, breve reflexión...

Urfaust es una obra sin catalogar, no es para enfrascar ni etiquetar.

Es la punta del iceberg que divisamos pero que a su vez se esconde y por momentos se deja ver. Es un Fausto que se redescubre y que descubre su entorno por momentos hasta de manera adolescente.

Su relación con Mefistófeles es de lo más interesante, crea con él un vinculo que cree dominar pero del que termina siendo rehén en un juego de inocencias y brutalidades.

El mal es uno de los conceptos que se manejan a lo largo de la obra pero introducidos de una manera muy humana y por eso es que nos llega tanto.

Fausto se ve inmerso en un mundo mágico donde el mal está a la vuelta de la esquina, ese mismo mal que va hacia la falta de esperanza, un destino marcado a fuego, donde este súper hombre cae vertiginosamente.

Los miedos, angustias, envidias y deseos oscuros acaparan la obra y los identificamos con nosotros mismos, con las debilidades que construyen nuestra sombra.

El espacio escenográfico fue un proceso, una búsqueda constante. Finalmente llegamos a trabajar un contenedor, un esqueleto en donde dentro de él transcurren las distintas escenas que forman la obra. Ésta estructura lineal y perimetral conjuga el vacío escénico interior y separa el espacio del adentro del afuera. Neutralidad, linealidad, geometría y versatilidad espacial fue lo que proyectamos como necesario para una obra de gran carácter textual.

Urfaust es un proyecto de tres años de trabajo. Pasamos por muchas ideas con muchos momentos de incentivo y muchas frustraciones. El proceso en grupo, junto con los actores, director y compañeros de diseño han hecho que el proyecto madure y se nutra de las propuestas de todas las áreas. En eso estamos, en eso seguimos…

(Ximena Seara y Yael Carretero, responsables de escenografía e iluminación)

¿Por qué hacer Urfaust? 

Urfaust me atrae. Habla del deseo y la verdad. ¿Cuál es la verdad posible? Declan Donellan dice que sólo podemos intentar decir la verdad, que cuando hacemos ese intento en nuestro discurso, decimos las palabras que más se acercan, para nosotros en ese momento, a la verdad, por ende la verdad es un intento y está completamente teñida del aquí y el ahora. Es lo mejor que podemos hacer con mayor o menor éxito. Del mismo modo que los personajes de Urfaust intentan con mayor o menor éxito, vivir la verdad, buscarla y algunos maquillarla para poder sobrevivir. La verdad es, en esta obra, una urgencia que se choca de frente con la urgencia del deseo y hasta con el instinto de supervivencia y eso me gusta.

Expectativas: 

Me gusta jugar y disfrutar el juego. Para mí una obra es una experiencia del día a día, porque sino me tranco, me pongo horriblemente nerviosa y no lo disfruto. Entonces tal vez sí espero algo, disfrutarlo mucho, pero sobre todo me encuentro en la dulce espera de entrar al juego. Estamos preparando, repitiendo y aprendiendo las curvas que tiene el recorrido, estamos estudiando el mapa del juego y creo que lo que más quiero es vivir ese momento en el que arranca la partida con el público.

(Florencia Caballero)